Existen varias razones por las
cuales, me siento más cercana a los jóvenes, que a los propios que sería lo normal
por mi condición de adulta responsable,
y precisamente son los motivos por los que me siento más unida a ellos.., los jóvenes. Por su responsabilidad y demostración de madurez, y si a este par de cualidades
tan indispensables, le añadimos la ingenuidad, sencillez y frescura, que la
falta de malas y abusivas experiencias te permite conservar todavía, el
resultado es que deberíamos plantearnos y analizar seriamente, donde está el
problema, en el cual alteramos nuestro curso natural hacía una existencia,
acorde a nuestros valores e ideales de base. Yo diría que mientras el protagonista
de nuestro día a día, es la honradez y el respeto, nuestros pasos son armónicos
con la naturaleza de nuestro ser, pero en el momento que en nuestra escena hace
aparición una desmedida ambición, no solo para subsistir y enorgullecer nuestra
respetuosa existencia, si no que se va convirtiendo en nuestro único trofeo,
pasando a ser nuestra razón de existencia, la avaricia del ser y tener, más y
mejor, nos lleva a una penumbra total y absurda, en la que no vemos más allá de
nuestra propia existencia y difícilmente, podremos ver y respetar la de los
demás.
Es un claro motivo por el que deberíamos
plantearnos, de una vez por todas, al lado de quien estamos, si al de una
natural evolución de la vida, respetando la luz de los valores y de la
sencillez, o al lado de los que creen triunfar, manteniendo un pulso constante
con la vida, utilizando precisamente, los más cobardes engaños y con sus ya
aprendidas trampas y emboscadas, es premiado con seguidores y partidarios de su
doctrina, sistema que dicho sea de paso, servirá para un
corto y frágil periodo, ya que mientras la naturalidad de la honradez, la
vocación y el saber hacer, no nos honre con su presencia y permanencia también
en la edad adulta, no conseguiremos absolutamente nada, ni mucho menos, un
periodo histórico que nos de la satisfacción de vivir, con orgullo y ser
conscientes de que si queremos, y nos esforzamos en mantener nuestro saber
estar.., SEREMOS.